Queda como un experto (alicantino y fino) en tu cena romántica

Queda como un experto (alicantino y fino) en tu cena romántica

Un buen vino es un compañero muy recomendable para una cena romántica de ensueño (y si es con un alicantino – un detalle casi obligatorio;). Seas de tinto o blanco, fan de rosado o prefieres el espumoso, o si incluso los adoras todos, es muy probable que cometas errores a la hora de servir o tomarlos.

Entonces, ¿cómo hay que tratar cada tipo de vino? ¿Qué tienes que saber para quedar como un experto en la cita que tanto esperas? Nosotros resolvemos tus dudas y te ofrecemos una pequeña guía para seguir.

¿A qué temperatura se sirve el vino?

A lo mejor, ya te suena algo de que “el vino blanco se sirve frío, y el tinto de la temperatura ambiente…”, pero no es del todo cierto y aparte hay mucho más detalles que tienes que conocer. Es recomendable que los blancos y los rosados estén entre 7 y 10 grados, diferenciando los vinos dulces que se tienen que tomar más fríos (5 – 9 ºC) y los jóvenes secos o fermentados en barrica menos fríos (entre 10 y 16 grados).

La mayoría de los vinos tintos alicantinos deben tomarse a una temperatura de entre 13 a 17 ºC, lo que es ligeramente más frío que la temperatura ambiente. Los tintos más jóvenes tienen que estar más fríos, mientras que los reserva y gran reserva se sirven a los 17-18 grados. En verano, no tengas miedo a ponerle más frío.

En cuanto a los vinos espumosos, deben almacenarse y servirse fríos, entre 4 y 10 grados.

¿Qué copa elegir?IMG_5174_1web

Las copas de vino blanco normalmente son más pequeñas que las de vino tinto, con un cáliz estrecho. Los vinos blancos no necesitan respirar tanto como los vinos tintos, para los que la oxigenación es vital para que su sabor se concentre. El cáliz de las copas de vino tinto tiene que ser más ancho, para permitir que una mayor cantidad del vino entre en contacto con el aire. Cuando el vino tinto respira, su sabor se vuelve más marcado.

¿Cuánto vino servir?

Siempre se sirve un poco menos de la mitad de la copa, lo que le da oportunidad al vino para que respire (y también para que la botella te dure más, así podrás disfrutar más del vino y de tu cita, por supuesto;) y es más elegante.

¿Cómo sujetar la copa?

Coger bien la copa es un gesto muy importante. Cuando tomas el vino, debes sostener la copa por el tallo, con las yemas de los dedos, lo que además de respetar la temperatura evita las antiestéticas huellas. Si sostienes la copa por el cáliz, tu vino se calentará muy rápidamente, anulando todos tus esfuerzos para servirlo a la temperatura correcta. Quedarás como un alicantino, fino y elegante.

Ahora, que conoces todos los detalles para que el vino cumple su mejor papel en tu cita, sólo queda una pregunta: ¿Y qué vino escoger? ¡De eso no te preocupes! Haz este test para descubrir tu tipo de Vinos Alicante Denominación de Origen y ¡enamórate!